Algunos Grouchismos de uso cotidiano

Julius Henry Marx (llamado Groucho por la expresión que quedaba en su rostro una vez que se pintaba las cejas y los bigotes) nació en el año de nuestro (suyo) Señor 1890 en la Ciudad de Nueva York. Luego de su temprano ingreso en el espectáculo como cantante solista, comenzó a hacer espectáculos de humor en el vodevil junto a sus cuatro hermanos (a saber, Harpo, Chico, Zeppo y Gummo) . Muy reconocido hasta la actualidad por sus "one-liners", es decir, frases cómicas de una línea que, en rigor, deberían ser llamadas (tal como el autor de este blog lo hace) "Grouchismos".

No se conforme con cualquier anécdota sin gracias, sea el alma de las fiestas con sólo repetir lo que dijo alguien más inteligente que usted, antes de que usted naciera. Con ustedes, "Grouchismos" para el uso cotidiano:

- Lo malo del amor es que muchos lo confunden con la gastritis y, cuando se han curado de la indisposición, se encuentran con que se han casado.

- Nunca entraría en un club que me admitiera como socio.

- Disculpen si les llamo caballeros, pero es que no los conozco muy bien.

- Debo confesar que nací a una edad muy temprana.

- Nunca olvido una cara, pero en su caso haré una excepción.

- Nunca voy a ver películas donde el pecho del héroe es mayor que el de la heroína.

- Es usted la mujer más bella que he visto en mi vida... lo cual no dice mucho en mi favor.

- Señorita... envíe un ramo de rosas rojas y escriba "Te quiero" al dorso de la cuenta.

- No piense mal de mí, señorita. Mi interés por usted es puramente sexual.

- La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después un remedio equivocado.

- ¡Cavar trincheras! ¡Con nuestros hombres cayendo como moscas! No tenemos tiempo para cavar trincheras. Las tendremos que comprar prefabricadas.

- Bebo para hacer interesantes a las demás personas.

- Estos son mis principios, si no le gustan... tengo otros.