Historia de perros
El señor Pollock, a pesar del amor incondicional demostrado por sus empleados y el amor condicional demostrado por sus lectores, siempre se ha sentido un poco discriminado, algo fuera de lugar, medio desplazado por los chicos "normales" como Nahuel Mutti y tres cuartos resentido hacia aquellos que no poseían sus identificables y, aunque adorables, perturbadoras discapacidades físicas. Tener una cabeza de perro, en definitiva, puede sumar tanto como restar y multiplicar tanto como dividir a un hombre (término usado entre comillas, o sea "hombre").
Es por eso que Marco Pollock se largó a un viaje místico para conocer sus vidas pasadas, tal vez de esa manera sentiría que no es un error de la naturaleza sino, muy por el contrario, un especimen de pedigree. Descubrir que era un ser con papeles en la historia, incluso si éstos eran papeles de reparto.
Luego de una intensa investigación que mencionará a continuación, el señor Pollock ha descubierto a su primer yo histórico: Anubis Pollock.
Ahora, el relato de Marco Pollock:
"He realizado una extensa investigación (¿vieron?) que me llevó a través del camino místico de chamanes amateurs en baños públicos en los que se me ofrecieron sustancias alucinógenas que ampliarían la conciencia de aquel cuyo espíritu estuviera... en ese momento del discurso, las sustancias hicieron efecto y no me acuerdo qué más dijeron. Lo que sí recuerdo es la imagen de aquel que fui cuando todavía no era. Anubis Pollock fue considerado un Dios entre los hombres, en especial por su capacidad de doblarse sobre sí mismo que, como a otros perros, le permitía alcanzar la zona genital con el propio hocico. Fue el primero de una especie que se hubiese propagado, excepto que su cara de perro le impidió cortejar a ninguna señorita, y para paliar su soledad dedicó todo su tiempo a mejorar su capacidad de autosatisfacción. Recorría los pueblos y daba clases abiertas y demostraciones públicas que solían estar plagadas de "
En Ediciones posteriores de Pecado Fresco, más vidas pasadas de Marco Pollock.
13 Comments:
que tierna historia.
y a propósito de San Agustín, encontré una frase muy acorde:
"Si precisas una mano, recuerda que yo tengo dos."
Fuente
http://www.frasesypensamientos.com.ar/frases-autor.html?autor=29
No olvide que la ingesta de sus propios jugos es altamente nutricional.
Pd. Y cuando escribo jugos, me da un poco de asquito. (Pero solo cuando lo escribo, el resto del tiempo no)
Esa historia tan canina me recuerda mucho a mi amigo don Flaco...
Buaaaaa!
Saludos cordiales de Amiga Portátil
Estimado Pollock: ¿Fue cuando era Anubis que tocaba en Los Chakales?...
me olvide de firmar...me hago cargo del ¿chiste? malo y facil de arriba
Pésame: Cito una vez más a la biblia: "Un hombre y una mano es comñía, dos manos son multitud".
Laura: Un asco, informativo, pero un asco.
Amiga: No sé quien es Don Flaco, asumo que un perro. Sino, no entendí nada.
Freud: No, ese era Chakalon, el malo de los Thudercats.
MP
Nuevo post, nuevo post, nuevo post!
queremos nuevas historias!!
queremos cualquier cosa que nos haga perder tiempo de estudio!
jajajaajja
"su cara de perro le impidió cortejar a ninguna señorita"
que cosa más divertida...
Saludos :¬)
* me tomé la libertad de linkear tu otro blog en el mío*
Hola Marco, te posteé una foto de mi Rodolfo orozco, a ver si lo conocés a tu pariente
Pésame: Ya va, ya va.
Agua: Idem anterior.
Tanux: Le permito esas libertades y más.
Melina: Veo el parecido, sí. Pero al abuelo Pollock le gustaba la joda, así que probablemente sea un primo no reconocido o algo así. Mándele saludos de mi parte igual.
MP
Brillante. Sencillamente genial. ¿Aprendió Akhemaké a doblarse sobre sí mismo?
Gueibor: Las crónicas históricas son bastante difusas al llegar a esas instancias. Nos gustaría suponer que sí.
MP
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